Son unos 20 millones de argentinos los que usan las garrafas. La Cámara de Empresas Argentina de Gas Licuado hizo una movilización en distintos puntos del país, y reclama el pago de la asistencia económica estatal.  

La Cámara de Empresas Argentinas de Gas Licuado (CEGLA) expresó esta semana su preocupación ante lo que consideró un «atraso insostenible de los precios del gas envasado del Programa Hogar, lo que lleva a un déficit crónico a las empresas fraccionadoras». «Si la Secretaría de Energía no actualiza los precios de referencia del gas envasado de acuerdo a lo que establece la Ley 26.020 se corre riesgo de desabastecimiento en todo el país, sobre todo en las provincias del norte», resaltó el presidente de la entidad, Pedro Cascales.

Según el dirigente, el precio actual de 740 por garrafa puesta en negocios habilitados «ni siquiera alcanza para cubrir el flete con el que se traslada el gas licuado de petróleo desde los puntos de producción hasta las plantas fraccionadoras de gas envasado».

Cascales resaltó que «el precio está desfasado» y las empresas «operan a pérdida». «En el NEA y NOA, ese valor no cubre ni siquiera los costos logísticos para transportar el gas a granel desde las zonas de producción hasta las plantas de fraccionado», sostuvo en declaraciones a Continental Corrientes,. 

«Solicitamos que se cumpla la ley y que se actualicen los precios. Hoy, la garrafa vale 740 pesos en comercios habilitados, debería valer el doble para cubrir los costos. Y para tener una rentabilidad como marca la ley, razonable, tendríamos que hablar de 1900 pesos«, expuso. 

«Nadie busca algo imposible y, además, nosotros sabemos que nuestros clientes tienen un presupuesto acotado», indicó el dirigente, resaltando que el pago de la asistencia económica por parte del Estado resolvería buena parte del problema de los valores retrasados. 

Dicha asistencia es otro de los problemas que presenta el sector: «El año pasado, el Estado dio una asistencia económica transitoria para que no se produjeran aumentos en los precios de las garrafas, que equivalía al 20% del precio de facturación de la garrafa, y eso no se paga a fraccionadores ni a distribuidores desde marzo de este año. Son casi 4000 millones de pesos los que el Estado adeuda», marcó. 

Por último, reveló el compromiso de la secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royon, para recibir a la entidad gremial en una audiencia la semana próxima. «Necesitamos previsibilidad para continuar con el negocio», resaltó. 

Situación más compleja en el NEA

En un comunicado difundido el jueves, CEGLA resaltó que «el precio autorizado (para la garrafa de 10 kg) ni siquiera alcanza para cubrir el flete con el que se traslada el gas licuado de petróleo desde los puntos de producción hasta las plantas fraccionadoras de gas envasado». «Es una situación absolutamente terminal que debe resolverse de manera urgente para garantizar el abastecimiento de 20 millones de argentinos que usan las garrafas en su vida diaria», subrayó Cascales. 

Así, se insiste en que «la situación es muy compleja debido a que hay cuatro provincias del nordeste del país que no están conectadas a la red de gas natural.  Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones dependen en su totalidad del gas licuado de petróleo (GLP) para cosas básicas como tener agua caliente y cocinar». Por eso la cámara sostiene que «un corte en el suministro del GLP en esos territorios los pondría al borde del colapso energético».

Por otra parte, la asistencia económica transitoria (AET) del 20% de la facturación otorgada al sector fraccionador por las resoluciones 809/21 y 980/21 no se le está abonando a las empresas desde marzo/abril pasados. No obstante, es una compensación que sólo se debe considerar como una medida alternativa, insuficiente y no como la definitiva, que sería la modificación de los precios cada seis meses de acuerdo a lo que establece la Ley 26.020.

Frente a la situación, CEGLA acompañó el jueves una movilización junto a la cadena de la industria del GLP, a fin de visibilizar la problemática y obtener una urgente respuesta de las autoridades de la Secretaría de Energía de la Nación. La misma se realizó en las ciudades de Buenos Aires, Córdoba, Corrientes, Paraná (Entre Ríos), Mendoza y Posadas (Misiones), incluyendo entregas de petitorios en cada una de las gobernaciones provinciales y en la sede de la SEN (Av. Paseo Colón 189, CABA).

El sector fraccionador de GLP –resaltó CEGLA- realiza todas sus inversiones en pos de garantizar la excelencia y la seguridad plena del servicio que brinda. Justamente esas son las principales ventajas del gas envasado. Además, da empleo directa e indirectamente a más de 9.000 personas y abastece con altos estándares de eficiencia a más de 20 millones de argentinos con un combustible ecológico, 100% nacional, fácilmente transportable y que es fundamental para el entramado del país.

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