Más adelante, el conductor sumó detalles sobre su estado tras el impacto: “Quedé tecleando, dolor de cabeza y de repente todo chorreado de sangre. Nos habían recibido con honores y salgo todo bañado de sangre. Llamaron a un médico y por suerte me pusieron una medicina china. No sé qué me pusieron, algo mágico era”.
El susto no pasó a mayores, pero el episodio volvió a mostrar que en cada travesía de Por el mundo puede pasar cualquier cosa. En este caso, la mezcla de aventura, miedo escénico y un golpe desafortunado terminó con Marley una vez más en el centro de la escena, aunque esta vez no por una broma, sino por un accidente que podría haber sido mucho más grave.