Cristina Fernández de Kirchner asumió este miércoles la presidencia del Partido Justicialista (PJ) con un acto en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) en el que resaltó la ausencia del gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, y otros dirigentes peronistas.
Tras la firma de un acta, documento que oficializa su nombramiento como titular del justicialismo, la expresidenta realizó un duro análisis del actual panorama político argentino.
«Asumir la presidencia del partido justicialista un 11 de diciembre del 2024, después de un año del gobierno de Javier Milei y un días después de su mensaje implica un ejercicio… Lo voy a formular con tres preguntas que nos tenemos que hacer. La primera pregunta es: ¿Qué esta pasando?», comenzó.
«Hay una primera cuestión que abordar: hay una aceptación de la sociedad a una suerte de ejercicio de ajuste violento si se quiere sobre aquellos sectores, claro, en tanto y en cuanto no me toquen a mí. Eso no significa una crítica social, sino una descripción de lo que estamos viviendo», continuó.
Y agregó que «lo que está viviendo la Argentina es más viejo que el sol, es un modelo de valorización financiera».
«La primera experiencia la tuvimos con Martínez de Hoz y la tablita. Eso es lo que hoy está sucediendo con la Argentina. No hay modelo productivo. Además, ayer en ese discurso por momentos desconectado de la realidad, repetitivo y donde proponía enviar proyectos ya presentados, quedó consagrado que este gobierno no tiene modelo productivo, tiene un modelo de valorización financiera», explicó.