El predio habría estado ocupado hasta este jueves por una funcionaria provincial, cuyo desalojo lo dispuso un juez en lo civil y comercial
Funcionarios de la Justicia provincial, acompañados por un fuerte dispositivo de seguridad a cargo de la Policía Provincial, realizaron este jueves un allanamiento y desalojo de un predio ubicado sobre la avenida Pueyrredón, en el barrio Mariano Moreno de esta ciudad, en el marco de una causa iniciada por una denuncia de usurpación.
Se trata de una causa iniciada hace 11 años por la señora Olga Duarte, quien había denunciado a la presidenta del Tribunal de Cuentas de la Provincia, Myriam Radrizani, por usurpación de un terreno que, según la denunciante, le pertenece.
El predio en disputa es un terreno que está colindante con otro de unos 50 metros de fondo en el que se encuentra la residencia de la doctora Radrizani y que tiene salida hacia la calle Vélez Sarsfield, paralela a la Pueyrredón. Trascendió que la finca que se allanó este jueves fue el fondo de la casa de Radrizani, que habría adquirido ese terreno que lo tenía en
proceso de escrituración, ya que al parecer sólo contaba con el boleto de compra venta.
Luego de un extenso trámite judicial que duró más de diez años, el juez en lo Civil y Comercial Nº 3 de la primera circunscripción, Dr. Raúl Vicente López Uriburu, dispuso el allanamiento y desalojo del terreno de grandes dimensiones, que cuenta con un quincho y otras edificaciones y una pileta de natación.
El operativo realizado este jueves en horas de la mañana llamó la atención de vecinos y transeúntes que pasaban por el lugar, que se encuentra frente a uno de los locales de la cadena de supermercados Changomas.
Desde horas tempranas, un fuerte dispositivo de seguridad se implementó en el lugar con la presencia de numerosos efectivos de la Policía que acompañaron a los funcionarios de justicia y a la propia denunciante de la usurpación, quien estuvo durante el procedimiento junto a su abogado.
Después de una intensa tarea de operarios con amoladores y otras herramientas, pudieron abrir el enorme portón para entrar al predio en cuestión, al que ingresaron los funcionarios judiciales y la reclamante del predio, acompañados de varios efectivos policiales.
Se supo que en el interior no se encontró a nadie, salvo varios perros que tuvieron que ser contenidos para seguridad de los funcionarios judiciales y policiales que realizaban el procedimiento. Fuente: Diario La Mañana